La Clínica Universidad de Navarra, en su sede de Madrid, ha realizado un curso centrado en las nuevas técnicas de localización para mejorar la cirugía oncológica de la mama y, por tanto, la calidad de vida de las pacientes. Organizado junto a la Sociedad Europea de Cirugía Oncológica (ESSO), se ha dirigido a especialistas europeos en cirugía de la mama, abordando diferentes temáticas: la ecografía mamaria, la cirugía axilar después de neoadyuvancia con técnica de ganglios marcados y biopsia de ganglio centinela, cirugía guiada por ecografía intraoperatoria y por semillas magnéticas, etc.

La jornada científica contó con sesiones tanto teóricas como prácticas (con fantomas y semillas magnéticas, así como biopsias ecoguiadas). Dentro de las técnicas de localización, también se probó el Pintuition System with GPSDetect, una tecnología de navegación para el tratamiento del cáncer de mama no palpable y otros tipos de tumores de tejidos blandos.

“El fin es ofrecer a las pacientes nuevas alternativas, que permitan tratar su cáncer de mama, pero manteniendo la mayor calidad de vida posible”
Dra. Isabel Rubio

Diirectora del Área de Patología Mamaria

“Gracias a este tipo de formaciones, que son vías para generar y compartir el conocimiento, es posible conocer los últimos avances que se han producido con el fin de ofrecer a las pacientes nuevas alternativas, que permitan tratar su cáncer de mama, pero manteniendo la mayor calidad de vida posible”, indica la Dra. Isabel Rubio, directora del Área de Patología Mamaria y organizadora del curso. Entre los ponentes, el curso contó con los doctores Antonio Esgueva y Carolina Sobrido (Clínica Universidad de Navarra), Ignacio Miranda (Clínica Tecknon), Lorenzo Rabadán (Hospital Universitario de Torrejón) y José Ignacio Sánchez Méndez (Hospital Universitario La Paz).

La doctora, que además es presidenta electa de la ESSO, explica que, en el Área de Patología Mamaria de la Clínica, siempre que sea posible, el objetivo es conservar la mama (80% de los casos), es decir, apostar por un tratamiento quirúrgico conservador con técnicas de oncoplastia, así como evitar la disección de los ganglios axilares usando la técnica de biopsia del ganglio centinela (85% de los casos). 

Texto:
María Luisa Guerrero

Este artículo ha sido publicado por la Clínica Universidad de Navarra en la revista Noticias.cun.